MARTÍN
MALHARRO
¿Qué significa
hoy Martín Malharro?, ¿Cómo se proyecta
en el tiempo?
Malharro muestra su gran alcance si se
tiene en cuenta que luchó contra el medio, batalló contra
los demás artistas de su tiempo y reformó la
enseñanza artística. Debe considerarse el valor
actual de su obra tanto como sus aportes a lo que podría
llamarse el movimiento impresionista argentino.
Se esforzó por actualizar la plástica argentina para ubicarla en
el movimiento mundial. Sus intentos no cayeron en el vacío y su obra prendió por
sus valores intrínsecos y las prolongaciones en sus discípulos
inmediatos y en los pintores volcados hacia el impresionismo.
Su pintura plantea: el problema de la actualidad en el arte, la autenticidad,
el impresionismo, la realidad de un arte nacional.
Su evolución se da en tres etapas: una de origen naturalista, con un arte
marinista y paisajista; otra impresionista, que supera a la anterior y por último
una tendencia a la ilustración.
Su
vida y sus comienzos en el arte
Su vida transcurre en soledad, incomprensión
y penurias económicas. Nace en 1865, en Azul, y muere en 1961, a
los 46 años. Por los '80, Sivori, de la Cárcova, Della Valle,
Aguyari, Zuberbuhler y otros, habían creado la "Asociación
Estímulo de Bellas Artes", que fue la más importante del
naturalismo estético en el país. En ese clima de arte se
formó Malharro. Su vocación se manifestó desde muy
joven, por lo que se enfrentó con su padre y se fue de su ciudad
natal a los 14 años. Llegó a Bs. As. y modificó su
apellido Mailharro por Malharro.
Trabajó diseñando rótulos de cigarrillos, tarjetas comerciales,
membretes, dibujando litografías sobre hechos policiales, etc. Concurrió a
las clases de dibujo de Francesco Romero, desde 1882 hasta 1889. Luego decidió cambiar
de ambiente y viajar a Rosario y Córdoba. Empieza a ganar dinero y se
distrae de su arte, por lo que vuelve a Bs. As. , repleto de cuadros, dibujos
y bocetos.
Así como se encuentran en Spilinbergo
resabios de las enseñanzas de Collivadino, ocurre lo mismo con Romero
en la obra de Malharro. Otras experiencias enriquecen su vida artística.
Conoce al doctor José María Ramos Mejía, que lo invita
a su estancia para que trabaje en paz, al margen de la ciudad. La naturaleza
lo atrapa y le anticipa el aire pleno de los impresionistas.
Luego va a Tierra del Fuego, donde adquiere la experiencia de la luz y
del mar, se vuelca al claroscuro. Vuelve sabiendo lo que quiere: luz, color,
ambiente. Malharro va hacia el impresionismo llevado por sus recuerdos
de infancia en Azul y La Pampa, Bs. As. , Sta. Fe y Córdoba, visiones cargadas de paz
que lo predisponen a la creación plástica. Todas estas etapas
de mar, sol, misterio, sugestión están presentes en su obra.
Roberto J. Payró que lo valora y aprecia su obra, le presentó a
Martiniano Leguizamón, otro gran amigo y lo recomendó como colaborador
de La Nación, lo que le dio alivio económico. Más tarde
colaboró también con El Diario, El Tiempo, Athenae y La Vasconia.
Siguió pintando e investigando, con obras dibujadas, cargadas de emoción
y de color, con formas que aparecían de manera fantasmagórica.
Expuso en 1894, en la segunda muestra de Ateneo que reunió 176 obras
de artistas residentes en Bs. As. Malharro presentó una marina, Corsario
La Argentina, que en 1904 fue adquirida por el presidente Roca. Su pintura
fue comentada en los diarios locales y le dio cierto renombre.
Su
viaje a París
A
fines de 1895 viaja a París en un barco de carga,
sus amigos le organizan una colecta que rechaza. Partió llevando
su piedra litográfica como único bien. Más
tarde se le reunieron su esposa María Luisa y sus
hijos María Amelia y Martín. Su vida en París
es poco menos que desconocida. Se instaló en Montmartre,
ganándose la vida con dibujos e ilustraciones, haciendo
modelos de bonetería y modas. Estudió francés,
inglés, italiano y alemán. Estuvo en Holanda
y Bélgica. Acentuó su formación plástica.
Esos 5 últimos años del siglo XIX fueron excepcionales
para el arte de Francia. El impresionismo atrajo a Malharro
desde el comienzo por su tendencia a la simplificación
y al idealismo. Aunque rechazó su neoclasicismo. Apreció el
dibujo contorneado, con tendencia al claroscuro. Buscaba
algo más que pintura decorativa. Pissarro lo atrajo
por su sentido de luz, ambientación y búsqueda
de la naturaleza. Malharro era un pintor de caballete que
se sentía bien rehaciendo en la tela el paisaje que
tenía ante la vista. Esos seis años europeos
fueron de estudio y afianzamiento de su propia condición
ante el impresionismo: Malharro era impresionista incluso
antes de conocer ese movimiento. La experiencia de París
significó una afirmación de su paisajismo.
Estudió a pintores como Barbizón, Millet, Monet,
Gauguin, Pisarro y otros. Investigó el puntillismo.
La influencia de los trabajos de los grandes pintores franceses
Monet y Manet , es decisiva en la obra de Malharro.
Su
regreso a la Argentina
A
fines de 1901 regresa a Bs. As. Ya en nuestro país se inicia una
nueva etapa de su drama estético y humano. Al año siguiente
expone en Witcomb, en un intento de actualización artística
en el país. La exposición dio a conocer los últimos
trabajos del pintor: fue atacado, negado o silenciado. Todavía estaba
en vigencia el gusto por el naturalismo y los escritores de la generación
del '80 seguían imponiendo sus clásicas ideas. Malharro coincidía
con la promoción del modernismo. La introducción del impresionismo
remite a dos hechos: los factores que lo condicionaron y su significación
estética en el contexto del arte nacional. Puede hablarse del impresionismo
entre nosotros con tres nombres que conforman la primera oleada: Malharro,
Faustino Bernareggi y Musto. También se destaca el impresionismo
criollo con Prins, Daneri, Malinverno, Parodi, Pedemonte.
La
paternidad del movimiento impresionista en Argentina
El
advenimiento del impresionismo fue preparado por Sívori,
que comenzó a evolucionar hacia una pintura más
clara y menos construida. La exposición de Faustino
Brughetti, en 1901, y la de Malharro, al año siguiente,
son las primeras muestras de impresionismo en el país.
Brughetti se basaba en la técnica de los manchistas,
que había conocido en Italia. La
paternidad del impresionismo debe evaluarse tanto por la
primicia como por la lucha llevada a cabo para imponerlo.
Romualdo Brughetti, hijo del pintor Faustino, sostiene que
si su padre exhibió telas impresionistas un año
antes, el mérito de Malharro consiste en haber dado
batalla por ese ideario estético. La muestra se desarrolló ante
la hostilidad y la incomprensión de un medio que no
estaba preparado. Con fervor y vocación Malharro,
comienza a divulgar las teorías y las técnicas
del impresionismo. Escribe, hace crítica de arte,
habla de los grandes pintores de ese movimiento, en El Diario,
en la revista Idea, y en otras publicaciones.
La
obra de Malharro
En
su obra se encuentran la construcción, el dibujismo, el peso. La
melancolía y la presencia de la noche. Un cierto tono gris y melancólico
en la pintura argentina que manifiesta un impresionismo de perfil nacional,
alejado por igual del francés y del italiano, y que afirma la autenticidad
del impresionismo local. Después de la exposición de 1902,
la hostilidad del medio se hizo más cerrada para Malharro. En 1907
se funda el grupo "Nexus", agrupación de artistas dirigida por Pío
Collivadino, que se caracteriza por su encono contra Malharro. Al año
siguiente, en su segunda exposición en Witcomb, se lo criticó,
silenció, negó y se fomentó un odio contra el pintor
que se prolongó mucho después de su muerte. Esta situación
se debió alas nuevas orientaciones plásticas, la soledad
y el aislamiento del artista y sus tendencias a respaldar a los más
jóvenes, a quiénes abrió generosamente su taller:
Luis Falcini, Mario Canale, Walter de Navazio, Ramón Silva, entre
otros. Silva fue su principal continuador. Malharro era un hombre silencioso,
activo y de carácter. Frecuentó a Alfredo Gutttero y fue
amigo de José Ingenieros. Por entonces ilustró las tapas
de varios libros de renombre.
Su
labor docente
Fue
designado inspector de dibujo en 1904 y tuvo cátedras
en la universidad de la Plata, en la escuela Normal de Profesores
y en la Escuela Normal de Maestros de Barracas, en los Colegios
nacionales Central y del profesorado y en la academia de
Bellas Artes. Dirigió los
cursos de dibujo del Consejo Nacional de Educación
y del Ministerio de Instrucción Pública. Esa
experiencia se tradujo en su libro "El dibujo en la escuela
primaria", donde resume sus ideas sobre el arte y las conclusiones
empíricas de su labor como pintor aplicadas a la enseñanza.
Elabora un método de enseñanza que comenzó en
el aula, siguió en el distrito y de allí se
extendió al total de las escuelas capitalinas. Se
instituyeron cursos de dibujo para maestros y al final del
año se hacían estadísticas. Malharro
es uno de los pivotes de la enseñanza artística
en el país. Para él, ir a la naturaleza significaba
el abandono de las recetas académicas, para dar lugar
a una pintura libre y luminosa.
Síntesis
cronológica
1865
- Nace el 25 de agosto en Azul
1879 - Viaja A Bs. As.
1882 - Inicia estudios de dibujo en la Asociación Estímulos de
Bellas Artes.
1886 - Viaja a Rosario y Córdoba.
1890 - Vive en la estancia del doctor Ramos Mejía
1891 - Viaja a Tierra del Fuego
1895 - Se convierte en colaborador de La Nación
1895 - Viaja a París 1901 - Regresa a Buenos Aires
1904 - Es nombrado Inspector Técnico de Dibujo
1911 - Publica "El dibujo en la escuela primaria"
1911 - Muere el 17 de agosto
1865 - Se le rinde un homenaje en Azul auspiciado por la intendencia, se inaugura
un monolito en su honor.